La celulosa nanofibrilada (NFC), patentada conjuntamente por UPM-Kymmene Corporation y CELLINK Bioprinting AB, es un material natural formado por fibrillas con una elevada relación de aspecto: de 5 a 20 nm de ancho y varias micras de largo, lo que la hace semitranslúcida y permite la obtención de imágenes y el análisis de las células.